Después de visitar algunos lugares en la unión americana, regresa a su casa la peregrina imagen del Señor Grande de Ameca, quien era esperada por algunos cientos de amequense que a pesar de la lluvia matutina y algo de frió se reunieron frente a la secundaria a esperar la milagrosa imagen que a su llegada trajo consigo muchas bendiciones y saludos de los hijos ausentes y a la vez que en cuanto arribo la imagen a Ameca brillo intensamente el sol haciendo a un lado la lluvia, no sin antes enmarcar el cielo con un majestuoso arco iris.
Los oficiales en custodia.
Los Cuetes.
Las Fieles.
En procesión.
El Pbro. Adolfo Ríos al frente de la recepción.
